¿Sientes que algo falla en esa máquina interna tuya, que hace que todo vaya como si estuvieras oxidado?
A diario escuchamos (y repetimos): “qué cansancio”, “estoy para el arrastre”, “me siento tan débil…” Parece una competición para determinar quién tiene el número uno en el ranking de “estar hechos polvo”.
Sin ser conscientes de lo que decimos, estamos expresando una importante realidad que va más allá de nuestras propias palabras: el desgaste de la energía vital.
Puede tener distintas causas como:
- Una mala alimentación
- Estrés y preocupaciones
- Dificultad para conciliar el sueño
- Complicaciones en las relaciones
- Falta de actividad física
- Consumo de tóxicos y tratamientos médicos
- Un trabajo que nos frustra


Muchas personas presentan este agotamiento incluso cuando parecen estar durmiendo lo suficiente. Lo cierto es que el cansancio es un síntoma, una llamada de atención que lanza nuestro organismo para que nos detengamos a ver y comprender el problema de fondo.
Tendemos a pensar que ese mensaje de nuestro cuerpo apunta hacia factores exteriores, sin entender que lo externo nos afecta porque hemos tomado la decisión de permitírselo.
Cuando el ser humano se encuentra en armonía, consigo mismo y con su entorno, vive en salud, y cuando esa consonancia falla, tanto hacia afuera como hacia dentro, aparecen los síntomas de que algo no anda bien.
Como cada una de nuestras células existe y se nutre gracias a la energía vital, el desequilibrio genera sustancias tóxicas que alteran su funcionamiento, y entonces el cuerpo se ve obligado a consumir energía adicional para limpiar y reparar los tejidos dañados.


Para la filosofía higienista, el ser humano se compone de tres cuerpos que deben ser alimentados adecuadamente:
- Físico
- Mental
- Emocional
Cuando algo nos afecta en uno de ellos, también lo está haciendo en los otros: todo lo que hacemos, sentimos o pensamos está relacionado entre sí y con la energía vital que sustenta nuestra vida.
Somos una unidad y no podemos sanar una parte aislada del resto. La enfermedad, desde esta perspectiva, no es un fallo ni una función errónea del cuerpo, sino un intento de recuperar el equilibrio mediante una acción que implica a todo el organismo.
El cuerpo es uno y la enfermedad es siempre la misma (agotamiento, desequilibrio energético, intoxicación) aunque los síntomas y el escenario físico puedan variar.


Si prestamos atención a la Naturaleza y nos dejamos sorprender por las distintas manifestaciones que nos ofrece la energía vital, nos damos cuenta de que la salud es la condición universal, el empeño de la Vida por exhibir su pluralidad de formas, colores, olores, texturas, en árboles, flores, animales…
Machado nos ofrece una imagen de esas ganas infinitas de la Vida por recobrarse una y otra vez:
Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo,
algunas hojas verdes le han salido.
En esencia, nuestras necesidades son similares al resto de los seres vivos: respiramos, comemos, crecemos, sentimos, dormimos, amamos… y tenemos a nuestra disposición un grandioso poder de sanación.
Estamos diseñados para desplegar las innumerables posibilidades de nuestra existencia en plenitud y armonía.


Curso Online de Nutrición
Experto en Nutrición Natural y Holística
Transforma tu vida y tus hábitos dominando la nutrición natural y holística.
Todos los tejidos, sistemas y órganos, formados por millones de células, han sido creados para funcionar eficazmente y las funciones de cada órgano se cumplen con una destreza admirable.
Pero tenemos la mala costumbre de perdernos el respeto a nosotros mismos, de despegarnos de nuestros cimientos. Y, como todo lo nuevo exige la muerte de lo viejo, la propuesta es que tomemos una ruta distinta de la que venimos recorriendo para desarrollar un nuevo enfoque interno, hacer algunos cambios, abandonar viejas rutinas y creencias que ya no dan respuesta a nuestras necesidades, aprender a gestionar algunas emociones y a decir cosas que callamos…
El camino lo tenemos que recorrer nosotros, a veces solos, a veces acompañados, pero siempre aceptando nuestra responsabilidad.
Otros artículos relacionados
El Impacto Transformador de la Alimentación Holística en la Salud Emocional y Espiritual
Explora el impacto profundo de la alimentación holística en la salud integral, abarcando aspectos físicos, emocionales y espirituales. Descubre cómo esta práctica reconoce la conexión entre lo que comemos, nuestro estado de ánimo y percepción del mundo. Desde la gestión del estrés hasta la Meditación activa y la elección ética de alimentos, este artículo destaca la influencia de una dieta equilibrada en el bienestar. Aprende sobre alimentos que favorecen la claridad mental, la importancia de la gratitud en la alimentación y cómo superar desafíos emocionales mediante una dieta holística. tu cuerpo, mente y espíritu de manera integral.
Los Problemas Asociados al Consumo de Azúcar Sacaroso: Una Mirada Detallada
Descubre los impactos en la salud del azúcar sacaroso, un disacárido presente en la caña de azúcar y la remolacha azucarera. Desde la obesidad hasta enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2, este artículo explora los riesgos asociados con el consumo excesivo de azúcar. Además, aprende sobre la relación entre el azúcar sacaroso y problemas de salud mental, así como su conexión con el envejecimiento prematuro. Obtén recomendaciones prácticas para reducir el consumo de azúcar, incluyendo la lectura de etiquetas, opciones saludables y una dieta equilibrada. de una alimentación consciente para mejorar la salud general y prevenir enfermedades crónicas.
Azúcares Refinados y Edulcorantes: Por Qué No Son Parte de una Dieta Saludable
Descubre los peligros de los azúcares refinados y edulcorantes artificiales en una dieta saludable. Este artículo aborda cómo estos componentes comunes en los alimentos procesados pueden impactar negativamente tu salud, desde contribuir al aumento de peso y obesidad hasta incrementar riesgos de enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2. Aprende sobre las consecuencias del consumo de azúcares refinados y edulcorantes artificiales, incluyendo alteraciones metabólicas, cambios en el apetito y preferencias de sabor, y efectos en la microbiota intestinal.Además, obtén consejos para elegir alternativas naturales y leer etiquetas de alimentos para una nutrición más equilibrada y consciente.